CLIMA

El clima de Italia varía de norte a sur y de las llanuras a las cumbres de las montañas. No obstante, Italia tiene una temperatura bastante agradable gracias al Mar Mediterráneo y a la protección que dan  sobre el país los Alpes, al norte del mismo. No obstante, el tiempo varía muchísimo dependiendo si estamos en el norte o en el sur del país, o de si se está en la montaña o en la playa.

El invierno se caracteriza por ser medianamente húmedo. El anticiclón siberiano, trae masas de aire polar continental muy frías, que provocan fuertes nevadas en el norte de Italia. El frío y las bajas temperaturas predominan en Los Alpes, y las regiones norteñas que sufren inviernos glaciales y veranos calurosos, mientras que en el Sur, lugares como Sicilia tienen las condiciones de temperaturas más altas y primaverales.  Esto produce que rapidamente pasemos del invierno al verano y viceversa, con primaveras casi testimoniales.

El clima en verano suele ser seco con entre tres y cinco meses de aridez; especialmente en la Italia del sur. El siroco, viento africano cálido y húmedo, afecta al del sur de Roma, y  origina al menos dos semanas de sofocante calor en el estío, provocando también calima. En los Alpes, en verano, las temperaturas siguen siendo fresca.

En primavera y otoño actúa el frente polar que trae las lluvias de estas dos épocas. En otoño es muy frecuente el fenómeno de la gota fría.

Las masas de aire que encontramos son de tipo tropical marítimo y polar marítimo. Se caracteriza por unos inviernos medianamente húmedos y veranos secos, con entre tres y cinco meses de aridez. La aridez es mayor en la Italia del sur que en la del norte. Sin embargo, esto no implica que encontremos zonas alpinas donde los bosques son muy verdes como en las laderas del volcán Etna.

Los centros de acción que dominan el clima son el anticiclón de las Azores, que actúa en verano, y las masas de aire que encontramos son de tipo tropical marítimo y polar marítimo. En invierno se ve afectada ocasionalmente por el anticiclón siberiano, que trae masas de aire polar continental muy frías, y que provocan fuertes nevadas. En otoño es muy frecuente el fenómeno de la gota fría, especialmente en el entorno del mar de Liguria, donde se instala una baja presión que afecta a toda la región. En verano, ocasionalmente, llega la acción de la baja presión sahariana, que induce masas de aire tropical continental, cálidas y secas con tiempo de calima. En las áreas de montañas, esquiar es muy popular durante el invierno (Alpes y Dolomitas) con abundantes pistas repletas de nieve.

El tiempo y las temperaturas de Italia como pueden comprobar van desde el frío de los Alpes hasta el calor sofocante de la costa sarda o siciliana. Para preparar el viaje aconsejamos consultar la previsión meteorológica, para llevar ropa acorde que nos permita disfrutar del tiempo italiano, ya sea bajo un paraguas, en la playa, o con la nieve.